El verdadero problema de la tecnología a nivel ambiental

       La tecnología ha desempeñado dos papeles fundamentales en el medio ambiente, el primer papel, que se dio durante la Revolución Industrial (entre la segunda mitad del siglo XVIII y principios del siglo XX) etapa de la cual aún quedan indicios, y un segundo papel dado más en la actualidad el cual es el intento de contrarrestar las consecuencias ambientales que ha tenido el mal uso de éstas tecnologías.

       Durante la Revolución Industrial, se dio el primer gran avance tecnológico en cuanto a maquinaria pesada, y debido al uso de combustibles fósiles y recursos no renovables como materias primas se generó un gran impacto bastante desfavorable para el medio ambiente, generándose consecuencias como: la desertización, la contaminación, la generación de residuos, los accidentes de petroleros, la deforestación, la destrucción de la capa de ozono, la disminución del agua potable, la degradación y erosión de los suelos fértiles, entre otros.

       Ésto se da debido a que en la época, existía un capitalismo creciente en el cual los dueños de las grandes industrias ignoraban las consecuencias ambientales que estaban generando al solo preocuparse por ganar dinero, seguir creciendo a nivel económico y ganar prestigio entre las demás compañías a espaldas de la contaminación y el impacto ambiental que estaban generando; la revolución industrial además de ser caracterizada por el capitalismo, también lleva un egoísmo muy marcado en la sociedad, donde las personas dejan de proyectarse a un futuro lejano y solo se interesan por cumplir metas y obtener beneficios a un corto periodo de tiempo, lo que conlleva al desinterés tanto por las demás personas y la sociedad futura, como por el medio ambiente y los recursos naturales no renovables que de seguir siendo empleados a esa velocidad tarde o temprano empezarían a escasear.

       Por otra parte, el segundo papel de la tecnología que se la venido dando principalmente en los últimos años, se empeña en contrarrestar las consecuencias que estamos viviendo hoy en día debido al uso desmedido y poco proyectado de los combustibles fósiles y de los recursos no renovables, para lo cual se han generado procesos y avances tales como: colectores de polvo, depuradores, recuperadores de vapor, sedimentación, lodos activados, lagunas de aireados, separadores de aceites, biofiltros, flotación del aire disuelto, ultrafiltración, tratamiento de carbones activados, fitoremediación y reciclaje, entre otros. 

       Éstos procesos, se dan por la nueva conciencia social y ambiental que se empieza a generar durante las primeras décadas del siglo XXI, donde al vivir las consecuencias de la Revolución Industrial y todo lo que ella conlleva, la sociedad empezó a vivir y generar cambios para que los frutos de sus acciones, tanto proyectadas a un futuro un poco más distante como en un futuro inmediato tuvieran repercusiones favorables e intentaran compensar las malas acciones pasadas, que si bien, no es algo que se ha logrado del todo, ha servido como inspiración a las nuevas generaciones, para ayudar y ser parte de este cambio, ayudando a concientizar a las demás personas sobre el impacto ambiental que genera el uso de las tecnologías contaminantes, como ayudando a generar nuevas tecnologías amigables con el ambiente que nos ayuden a detener o a frenar el rápido avance que han tenido el efecto invernadero y el calentamiento global. 

       Si bien, el primer papel ha generado un impacto ambiental tal que el segundo papel aún no ha conseguido en su totalidad remediar sus secuelas, no hay que tildar a la tecnología como el autor de los problemas ambientales que se han dado hoy en día ya que la tecnología es simplemente una herramienta para el progreso y las consecuencias de su uso dependen del fin que les dé el ser humano.